La Fundación Chirivella Soriano acoge, hasta el 9 de enero, en sus salas del Palau de Valeriola una exposición dedicada al artista Santiago Ydáñez. La muestra revisa la obra de Ydáñez de las dos últimas décadas. Son obras de gran formato con visiones de rostros humanos, animales, santos y cuerpos, unas obras que plantean cuestiones de representación personal, de autorretrato y de construcción de personajes.
La exposición ocupa las tres plantas del Palau Joan de Valeriola, sede de la Fundación Chirivella Soriano, con un total de 36 obras. La muestra perfila una mirada en perspectiva a la carrera consolidada en el ámbito internacional de Santiago Ydáñez, y que hace especial hincapié en los rostros de la gente.
La muestra deja claro que a Ydáñez le interesa la evolución humana con el imaginario religioso porque la unión de diferentes espiritualidades, al igual que diferentes animalidades es el referente de su trabajo. El artista une aquí imágenes de corte religioso con otras de naturaleza, principalmente faunística, y rostros humanos con gesto de ausencia mística o de potente presencia romántica con escenas sacadas de museos de historia natural. A pesar de todo, alguna de sus piezas tiene un marcado aire decorativo con un halo entre palaciego o de museo.